Werner Pfennig y la Juventud de Hitler

Werner Pfennig, uno de los personajes principales de All The Light We Cannot See por Anthony Doerr, es una de tantas historias de niños atrapados por las consecuencias de los cambios impuestos por Hitler en Alemania. Pero Hitler hizo mucho más que solo crear escuelas de guerra, y todo este contexto es el que envuelve al joven Werner en los acontecimientos del libro.

Poster de propaganda de la juventud de Hitler
Poster incitando a los jóvenes a unirse a la juventud de Hitler (Voluntarios al frente! Jóvenes al servicio de la Juventud de Hitler) via el US Holocaust Memorial Museum

Es bien sabido que en 1929 una gran depresión económica golpeó a los Estados Unidos, pero la misma depresión económica tuvo impacto en muchos lugares de Europa, Alemania incluida. Sumado a esto, Alemania estaba endeudada por reparaciones que se le habían atribuido por su involucramiento en el inicio de la Primera Guerra Mundial (en ese momento llamada La Gran Guerra). Los niveles de pobreza y desempleo crearon un descontento generalizado entre las personas de Alemania.

Las agrupaciones juveniles eran una parte común de la sociedad alemana, y Hitler sabía que eran una manera muy eficiente de controlar la mentalidad del pueblo alemán: empezando desde niños. Inició su proyecto creando su agrupación de la juventud de Hitler de una manera muy hábil: dándole la imagen de agrupaciones de jóvenes para jóvenes. Nacieron como agrupaciones pequeñas y clandestinas, los líderes siempre siendo chicos de 17-18 años, que hablaban de los jóvenes reunidos bajo el manto de la igualdad. Esto era una de las principales atracciones: no importaba si eras rico o pobre, para el Reich todos eran iguales.

Lo que si importaba era tu raza y religión, pero eso no fue visible desde el inicio. De hecho muchos jóvenes que trataban de unirse eran rechazados por su herencia judía y se sentían mal de no ser parte de este grupo de líderes sin saber lo que llegaría a representar.

Hitler subió al poder como canciller de Alemania en 1933. Un mes después, sucedió un ataque al edificio parlamentario del que Hitler culpó al partido comunista, por lo que pasó una ley para suspender los derechos civiles del pueblo alemán (con la excusa de encontrar a los criminales). Así, Alemania perdió privacidad (podían entrar a sus casas e intervenir los teléfonos) y el derecho a la libertad de expresión. En las elecciones de funcionarios que se llevaron a cabo en los meses siguientes, más nazis se sumaron al gobierno y pasaron una ley para darle a Hitler el poder absoluto para pasar leyes. Al año siguiente, Hitler tomó también el puesto de presidente de Alemania y se convirtió en el Führer o Líder supremo de Alemania.

Jóvenes alemanes marchando, cargando banderas e instrumentos de banda de guerra.
Marchas de los jóvenes pertenecientes a la juventud de Hitler (del documental de 1999 World War II: The Hitler Youth, disponible en Amazon Prime Video)

En este punto se prohibieron todas las agrupaciones juveniles no afiliadas al Reich, y unirse a la juventud de Hitler se volvió obligatorio. En el episodio 2 de No Me Hagas Leer hablamos sobre los exámenes de admisión de Werner para unirse a la escuela a la que se le postuló por ser bueno en ingeniería. El contexto histórico es que Hitler impuso previa afiliación a la juventud de Hitler como requisito para pasar a cualquier otro tipo de educación universitaria. Estos exámenes, como fue la experiencia de Werner, eran muy predominantemente físicos (de fuerza, agilidad y rapidez) y de raza (el color de ojos, el tono de la piel, las medidas de los rasgos faciales). En resumen, cosas que Werner no asociaba con ingeniería en lo absoluto pero, dado que sus condiciones de pobreza previas no eran algo a lo que añoraba volver, aceptó sin cuestionar.

Jóvenes alemanes cruzando un rio colgados de cuerdas como parte de una pista de obstáculos.
Entrenamientos físicos de pistas de obstáculos para los jóvenes en las escuelas de la juventud de Hitler (del documental de 1999 World War II: The Hitler Youth, disponible en Amazon Prime Video)

Hitler dejó de lado la educación cultural y científica que no tuviera que ver con el orgullo nacionalista o con las marchas de honor a la patria alemana, y dio prioridad a la formación física de los hombres en específico en boxeo, correr, campos de obstáculos, lanzamiento de bala (con una bala con una sospechosa similitud a una granada), entre otros “deportes” que pudieran ser enfocados más tarde a la formación militar. Todo esto es lo que vemos pasar a Werner cuando es admitido en la escuela, que al ver su proeza en ingeniería, decide enfocar esa destreza a la búsqueda de frecuencias enemigas.

Al terminar la guerra, por consiguiente, muchos jóvenes alemanes vieron sus vidas destruidas ¿Te imaginas haber vivido para un solo propósito toda tu juventud y darte cuenta que era el propósito erróneo?

Bibliografía

Para más información del tema, les sugiero la página del US Holocaust Memorial Museum, en específico este artículo sobre la Juventud de Hitler. También pueden ver el breve documental de World War II: The Hitler Youth, gratuito para los suscriptores de Amazon Prime. Les dejo la bibliografía de un breve libro que me resultó interesante enfocado en este tema también:

Hitler Youth: Growing Up in Hitler's Shadow (Scholastic Focus)
Susan Campbell Bartoletti
Edición Ilustrada 2019
Scholastic Nonfiction
ISBN 978-13383-0984-3
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